Poniendo un ejemplo extraño, como los que suelo usar en mis platicas cotidianas, sé que si despertara después de un año o varios meses de un coma en medio del campo mexicano a finales de octubre, podría saber la fecha inmediatamente. Quizá por el aire raro, la temperatura, los aromas, la imagen elegante de Luna y por otras tantas esencias de otoño que llevan estos últimos 7 año con año.
2 comentarios:
Cierto, esa atmósfera tan extraña que se vive en estas fechas, creo que no hay una semejante en otros momentos.
Saludos!!
PD: Es tu departamento el de la imagen? Que parece tienes buena vista.
Así es , Guerrero, es mi depa y tiene muy buena vista :)
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