lunes, 1 de junio de 2009

Cuando alguien más me ha ganado una buena idea

El juego es sencillo. Dos jugadores en una mesa deben escribir uno de dos dígitos, "1" o "0", sobre una tarjeta de papel y colocarlas simultáneamente boca abajo en el centro de la mesa y deberán ser mostradas minutos después. Si ambos números son diferentes, tu ganas. Si son iguales, pierdes. Hasta aquí esto es una simple variante del Disparejo, solo que falta un detalle que lo vuelve más interesante. Tu oponente ha viajado al futuro y ha regresado al punto en el que el juego va a comenzar, por lo que sabe cual es el numero que vas a elegir. Para poder ganar, por lo tanto, debes engañar a tu oponente. Bien, jugemos.

Si tomamos en cuenta que una vez que las tarjetas estén en el centro de la mesa, no hay nada que pueda cambiar los números ellas, por lo que tu victoria debería ser posible gracias al "libre albedrío". Pero el hecho que tu propia decisión del futuro se haya convertido en una incertidumbre por que otra persona la conoce, se convierte en una gran desventaja. ¿Que harías entonces? Si eliges 1, en el futuro habrías elegido 1 y tu oponente lo sabe, así que para engañarlo podrías elegir 0. Por otro lado, podría ser que hayas elegido 0 porque erróneamente creíste que perderías si tomabas el 1 y el 0 sería tu elección del futuro. Aparentemente no puedes ganar, porque has perdido tu libre albedrío.

Pensaba en esto desde hace muchos años. Nunca me molesté en averiguar si era la primer persona que había pensado en eso, no le daba mucha importancia, solo era uno de muchos pensamientos que me pasan por la noche y tampoco recuerdo haberlo comentado con alguien alguna vez. Hace poco que me enteré que, básicamente, esto se llama la Paradoja de Newcomb.

5 comentarios:

Román Villalobos dijo...

De cualquier forma el oponente ya sabría el movimiento, psicosis!

Estaría interesante si, por ejemplo, se pudiera elegir uno de tres símbolos. Cuantas posibilidades habría? O seguiría siendo lo mismo?

Aaay Newcomb

Barum dijo...

Madres... entonces si eso fuera posible (del cuate que viaja al futuro) ninguno tendria libre albedrio y estariasmos destinados a hacer lo que ya esta "escrito"... pero como se supone que si lo tenemos (el libre albedrio) entonces no es posible viajar al futuro...

Y que pasa hacia el pasado?... como sea ya paso... pero si se cambia algo en esa epoca que afecte directamente con los acontecimietos presentes, estos desaparecerian... imaginate que vas al momento en que se conocen tus papas y no los dejas que se conozcan... en ese momento desapareces, como en el presente (su futuro) no existes, entonces no hay quien viaje al pasado (su presente) para evitar que se conozcan, y se conocen, naces y en el presente, viajas al pasado para evitar que se conozcan, entonces.... tiene nombre eso? Paradoja de Barum? =P el caso es que graficamente lo veo como dos aros unidos en un punto (en ese caso el momento en que se conocen tus padres) y representan las lineas del tiempo, entonces recorres uno, llegas a ese punto y te vas hacia el otro aro...llegas a ese punto y otra vez vas al mismo aro...

chale, que pirado... pero como tu dices... son pensamientos que surgen de repente

Saludos

Rodolfo Escobar dijo...

Rocalfo: En el caso de tener tres opciones me imagino que debería ser mas probable ganar, en teoría. Pero en la practica al tener un oponente con esa condición especial, acabaría siendo lo mismo. Aveces las probabilidades no parecen encajar en la vida daría. Se dice que la probabilidad de encontrarse en una fiesta de cumpleaños con personas que cumplan el mismo día es de mas 50% y esto no pare ser así.

Barum: Muchos piensan que la paradoja de Newcomb es una prueba de que no se puede viajar al futuro y regresar porque se estaría rompiendo el principio de la casualidad; los efectos predecerían a las causas. También te ganaron esa idea jaja; es la paradoja de Barjavel o la paradoja del viaje del tiempo.

Guerrero dijo...

Esto se me hace un paradoja, muy complicado... creo que si pasara estallaría el propio universo...

En fin, creo que la única diferencia entre las personas es que hay quien se atreve a comentar sus ideas y otros como nosotros que sólo klas dejamos como un momento de lucidez.

saludos

Anónimo dijo...

con esto que acabo de leer me doy cuenta que no soy el unico loco,que tiene sus locas ideas.