lunes, 15 de agosto de 2011

Meditaciones semimetafisicas sobre el amor

Creo que una de mis limitaciones más grandes a la hora de escribir es mi pretensión. A veces siento la necesidad de decir ideas simples de forma elegante, con las palabras acertadas, lo qué hace detenerme antes de siquiera comenzar a escribir . De ahí quizá el por qué nunca he escrito sobre el amor en sí. Suelo imaginar el caso en que una mujer me pregunta lo que yo creo que es el amor. Ha sucedido, pero mis respuestas nunca me han convencido. Siempre evite la explicación bio-química; es aburrida y hasta incompleta en términos técnicos. Alguna vez traté el asunto desde el punto de vista conductista (resultado de largas conversaciones con mi psicólogo); un desastre. Ella terminó en las lagrimas. Le había advertido que la respuesta podría parecerle frívola. Yo no soy alguien que defienda fanáticamente las teorías. Si estoy de acuerdo con algunas teorías de psicología conductista es porque las considero bien fundamentadas pero puedo acepar otra explicación si "funciona mejor". Aunque debo confesar que disfruto un poco hablar del amor en ese sentido, en tono serio como una verdad absoluta, acentuado su simplicidad y frialdad natural, quizá como una venganza contra mi mismo por haber hecho muy poco para buscarlo y sentirlo. Por situaciones similares he cambiando la forma de responder. Al preguntar lo que es el amor se espera una respuesta más personal, una interpretación, una frase bonita que citar. Siempre lo supe, pero me gana mi necesidad de complicarme con profundidad y objetividad. Me quedo entonces con la idea de Charles Baudelaire: es el anhelo de salir de uno mismo.

3 comentarios:

Guerrero dijo...

Muy buena frase, pero al final el amor no importa cómo lo expreses, siempre será lo que es, atractivo y cariñoso, o frío y destructivo, pero cada uno ve la máscara que necesta ver.

Saludos!!

PD: Creo que me identifique con lo primero que mencionas... umm

Anónimo dijo...

Lo que me parece problemático es encontrar un blog que me puede tomar un minuto sin embargo, tu blog es diferente. Bravo .

Rodolfo Escobar dijo...

Gracias, Anonimo. Tenemos el mismo problema. Tal vez también te habrás dado cuenta que muchos buenos blogs (mejores que este) murieron por Twitter. Yo no soporto Twitter. No tengo muchos lectores acá, pero agradezco enormemente a los que tengo.

Saludos.