lunes, 15 de septiembre de 2008

Tomorrow Never Knows

Son las primeras horas del día de independencia de mi país. Hace tan solo unos años septiembre era una fecha muy especial para mi, no por ser muy patriótico sino porque era un maldito piromano. Desde niño he tenido una extraño encanto hacia el fuego. Cuando había una fogata me entretenía viendo quemarse la leña seca, creo que aun lo hago. Tranquilos, nunca queme un edificio. En estas fechas en el poblado de Xoxocotla, Morelos atestaban a todo lo largo de la autopista que va a Cuernavaca de decenas de puestos de fuegos artificiales cuetes. Mi padre y yo íbamos a surtirnos de todo un arenal que quemaríamos en nuestra celebración familiar del 15 que hacíamos (si "hacíamos" cuando la familia era feliz y unida) en la casa de mi abuela en Puente de Ixtla. Se trataba de una competencia de puestos de comida típica que armábamos en la noche en el patio de la casa. Cada equipo formado por las familias de los tíos entregábamos $200 para el bono que seria el premio (con 9 tios mas los primos grandes se juntaba una buena cantidad). Al final un jurado, que casi siempre eran los vecinos (o en una ocasión hasta el padre del pueblo) elegía a los ganadores calificando la originalidad y calidad de la comida y se les entregaba el dinero acumulado. Después dábamos nuestro por propio "grito" desde la terraza, eso si siempre con un chingo de humor mexicano. Lo que seguía era quemar los $400 pesos de cuetes hasta las 5 de mañana.

Han pasado ya varios años desde un septiembre así. Ahora estoy Merida en un clima distinto y lejos de mi familia. Extraño esa frias madrugas morelenses de septiembre impregnadas de azufre, escuchando los ecos a la distancia de las cumbias de los Angeles Azules.

5 comentarios:

Guerrero dijo...

creo quem todos tenemos un poco de esa mente retorcida con el fuego, a mi me gusta siempre ver cómo el fuego asrde pero no soy fanático a los fuegos artificiales, siempre hay mucho ruido y el olor a pólvora luego me molesta, aunque me gusta verlos también hace mucho que no quemamos nada por aquñí, quizá desde el 2001 o 2002, recuerdo que cada navidad, año nuevo o fiestas patrias salía la competencia (conciente o inconciente) entre vecinos de quemar más cuetes, los vecinos de enfrente siempre dejaban los trozos de carrizo, papel, encendedores y demás cosas casi en la puerta de la casa de mis vecinos de a lado y la señora es media especial y siempre en la mañana nos la dejaba bien acomodad en la puerta de nuestra casa para que al final mi hermano y yo la recogieramos... como la odio.
Bueno las cosas cambian y algunas cosas se extrañlan y se olvidan ojalá y nunca se olviden cosas así porque son divertidas.
nos veremos luego y que tengas un buen día

Anónimo dijo...

Comparto la opinion de guerrero, igualmente siempre he tenido ese afan hacia el fuego, no se es algo que como bien lo dice guerrero una extraña atraccion hacia jugar con el fuego, y es divertido, aunque a veces no tanto cuando te apendejas y te quemas, te idiotiza tanto que sufres consecuencias de su encanto jajaja, vale te cuidas, y QUE VIVA MEXICO CABRONES; A FESTEJAR EN GRANDE, COMO PANCHO VILLA Y SUS DOS VIEJAS A LA ORILLA JAJAJAJA

Anónimo dijo...

TAmbien comparto tu nostalgia familiar, de igula manera ma la pasaba asi con mi familia hace apenas unos años, es dificil asimilar que pues ahora ya no es asi, uno crece, las cosas cambian en poco tiempo y creo que la familia en vez de ser mas unida cada año mas se aleja, pero algo que aun valoro mucho y que es mas importante para mi que cualquier otra cosa, es el heho de tener a mis padres, mi hermana y mi abuela aun unidos y eso es algo que jamas quisiera que se perdiera, ojala y se tu caso tambine con tus jefes y tu hermana, recuerdo hermano que cada dia crecemos y vendran nuevas experiencias como las que hemos pasado y eso algo que debemos llevar muy presente y sobre todo no perder el espiritu que nos identifica como mexicanos, no crees?

Rodolfo Escobar dijo...

Creo que me equivoque la independencia es hasta mañana no? bueno es como navidad no nos vamos con la finta de que es el 24.

Gracias por sus comentarios.

.Cech. dijo...

si aveces llega un momento en q los recuerdos nos dicen lo bien que la hemos pasado en la vida